por Acerca de Marc Darrow MD, JD
Muchas veces un paciente ingresa a nuestra consulta con un diagnóstico indescriptible de dolor de espalda y/o dolor de cadera que lo acompaña. A pesar de los numerosos tratamientos que pueden incluir la inyección epidural de esteroides o cortisona, el paciente todavía tiene dolor y ahora se le recomienda un procedimiento espinal debido a que “se ha visto” una resonancia magnética. ¿Pero en realidad, el problema del dolor está en el disco? Esto es lo que los investigadores médicos se están preguntando.
Los médicos de la Clínica Mayo han publicado un artículo titulado: “Papel comparativo de la degeneración discal y la falla del ligamento en la mecánica funcional de la columna lumbar”. En este trabajo, los investigadores de la Clínica Mayo querían hacer una definición clara entre dos problemas que afectan a los pacientes con dolor lumbar.
- Primero, si este dolor podría provenir de los discos, o
- Segundo, si este dolor podría venir de los ligamentos espinales.
Los investigadores de la Clínica Mayo sugieren que es esencial reconocer cómo se mueve la columna vertebral para distinguir entre los diferentes tipos de trastornos de la columna vertebral para poder hacer un diagnóstico que, en última instancia, pueda conducir erróneamente a una cirugía de espalda.
- Si un paciente tiene inestabilidad, movimientos excesivos y disminución de la rigidez, los médicos deben examinar si hay daños en los ligamentos.
- Si es lo contrario, es decir, si existe menos movimiento, más rigidez, el médico debe buscar la enfermedad del disco. 1
Investigadores Alemanes van un paso más allá; ellos sugieren que, aunque la cirugía puede reparar los problemas obvios de la enfermedad discal y resultar exitosa, el cirujano debe estar muy consciente de que el daño de los tejidos blandos, los ligamentos y las estructuras de soporte de la columna vertebral pueden ser significativos y graves y los cirujanos deben equilibrar entre la intervención quirúrgica y no quirúrgica para prevenir las cirugías fallidas. 2
En otro documento de Alemania, los médicos analizaron la conexión poco conocida entre los ligamentos pélvicos y los ligamentos espinales en los pacientes con dolor lumbar.
Ellos escriben: La influencia de los ligamentos del anillo pélvico posterior sobre la estabilidad pélvica es poco conocida. El dolor lumbar y el dolor en la articulación sacroilíaca se describen como relacionados con estos ligamentos. Cuando estos ligamentos están dañados o debilitados, son generadores de dolor lumbar. 3
En el entorno clínico, después de un examen físico, encontramos (a menudo) que el dolor del paciente proviene de los ligamentos, lo que significa que tienen un esguince. El tratamiento de los ligamentos con PRP, Células Madre derivadas de médula ósea o Proloterapia puede ofrecer al paciente una solución simple, más barata, menos invasiva y, sobre todo, no quirúrgica para su dolor de espalda crónico.