Con autorización de Ross Hauser.
Muchas condiciones pueden causar dolor crónico en el hombro, como desgarro del manguito rotador, hombro congelado, osteoartritis, pinzamiento e inestabilidad articular.
Inestabilidad de la articulación del hombro
Cuando se trata de buscar opciones no quirúrgicas como tratamiento del dolor crónico del hombro, los pacientes frecuentemente se encuentran investigando nuestros tratamientos de inyección de Proloterapia Integral incorporando diversos tratamientos como la Terapia de Células Madre, la Terapia de Plasma Rico en Plaquetas y la Proloterapia Standard con Dextrosa.
Estas técnicas de inyección estimulan la reparación del tejido lesionado y han sido citadas en la investigación como curativas para el dolor crónico.
En el paciente atlético, las lesiones en el hombro, como caídas sobre una mano extendida, dislocaciones o golpes directos en el hombro pueden causar daño tanto a la articulación como a las estructuras circundantes (es decir, ligamentos y tendones). Cuando estas lesiones no se curan correctamente, los pacientes pueden desarrollar dolor crónico en el hombro que no parece desaparecer a pesar de los diversos métodos de tratamiento.
Investigación de Proloterapia Standard en el Hombro
En un Estudio Retrospectivo Sobre el tratamiento de Proloterapia Standard de Hackett-Hemwall para el Dolor Crónico del Hombro en una Clínica de Caridad para Pacientes Ambulatorios en Illinois. Journal of Prolotherapy. 2009; 1 (4): 205 – 216.
Se estudiaron 94 pacientes con un promedio de 53 meses de dolor de hombro no resuelto que fueron tratados trimestralmente con Proloterapia.
Un promedio de 20 meses después de su última sesión de Proloterapia, se contactó a los pacientes y se les hicieron numerosas preguntas con respecto a sus niveles de dolor y una variedad de síntomas físicos y psicológicos, así como las actividades de la vida diaria antes y después del último tratamiento de Proloterapia.
Los resultados de este estudio mostraron que los pacientes tratados con proloterapia tuvieron una disminución estadísticamente significativa en su nivel de dolor, rigidez y sensaciones de crujido (crepitación), al nivel de p <0,0000001, incluyendo el 39% de los pacientes a quienes otros médicos les habían dicho que no había otras opciones de tratamiento para su dolor y el 21% a quienes se les había dicho que la cirugía era su única opción.
Más del 82% de todos los pacientes experimentaron mejorías en el sueño, la capacidad de ejercicio, la ansiedad, la depresión y la discapacidad general, tras la Proloterapia. 97% de los pacientes recibieron alivio del dolor.
Conclusión: en este estudio, los pacientes con dolor crónico del hombro reportaron mejorías significativas en muchos parámetros clínicos relevantes y en la calidad global de vida, luego de recibir tratamiento de proloterapia stándard.