Con autorización de Ross Hauser, MD
Un artículo del 2013 en Orthopedics Today advierte contra el alto grado de variabilidad entre los profesionales que utilizan Plasma Rico en Plaquetas (PRP). Las principales preocupaciones son: falta de estandarización en los regímenes de tratamiento y en las concentraciones de fórmula. También se mencionan las diversas marcas, el número de sesiones, el número de áreas tratadas, etc., variables que hacen que sea difícil determinar el mejor uso del PRP.2
Médicos italianos expresaron su preocupación por la falta de estandarización entre los médicos que usan PRP en un estudio de 2015. Los investigadores reconocen el papel del PRP en la regeneración del tejido óseo, del tendón, del cartílago y del ligamento, demostrado en numerosos estudios preclínicos publicados en los últimos 10 años con resultados muy prometedores, aunque aún persisten muchas preguntas y resultados polémicos.
Los mismos investigadores que escriben en la revista médica Biomed Research International solicitan estudios para definir la dosificación, el momento y la frecuencia de las inyecciones de PRP, diferentes técnicas para su administración y la ubicación de la misma, las condiciones fisiológicas óptimas para las inyecciones, el uso concomitante de proteínas recombinantes , citoquinas, factores de crecimiento adicionales, andamiajes biológicos y células madre, etc., para poder así desarrollar protocolos de tratamiento óptimos con los que se puedan manejar eficazmente distintas afecciones musculoesqueléticas.1
En 2017, los médicos han escrito en la revista médica Pain Physician:
- «Corresponde a cualquiera que utilice un kit específico de PRP, comprender su formulación y consistencia precisa, así como la justificación de la técnica utilizada y la aplicación del mismo. La falta de estandarización y control de calidad, además de las diversas aplicaciones del PRP y diferentes resultados, hacen difícil generar datos convincentes «3.
Lo que los investigadores están pidiendo son protocolos que son utilizados por nuestro mentor, Dr. Ross Hauser, (hace más de 25 años) y en el Centro de Proloterapia Intensiva desde 2014.
Desafortunadamente, al igual que muchas modalidades de tratamiento nuevas y futuras, hay usos buenos y no tan buenos de las técnicas. Algunos médicos, sin tener mucha experiencia, con poco o ningún conocimiento, (excepto un curso de fin de semana) están utilizando la terapia regenerativa a base de PRP. Es menester decir que La Proloterapia es una técnica médica especializada. No sólo implica ser capaz de elegir el agente proliferante adecuado para aliviar y/o sanar los dolores del paciente, sino que también implica hacer primero el diagnóstico adecuado, y luego aplicar el tratamiento indicado para la completa curación de la lesión. Esto es lo que llamamos Proloterapia Integral o Intensiva.
El PRP ayuda al crecimiento del hueso
Investigadores de la Universidad de Connecticut se dispusieron a descubrir cómo los diferentes métodos de PRP afectan al tejido muscular, las células y el tejido óseo en seres humanos.4. Ellos trataron de recomendar una concentración estandarizada de plaquetas (la cantidad óptima de plaquetas de sangre reintroducida en la articulación artrítica).
Descubrieron que el PRP ayuda a que las células del hueso, el músculo y el tendón proliferen sin importar el nivel de concentración celular. Esta proliferación conduce a la curación del tejido dañado así como del dolor y de la lesión crónicos.
PRP ayuda con lesiones osteocondrales (cartilaginosas y óseas)
Recientemente, el American Journal of Sports Medicine publicó un artículo sobre el uso del PRP para lesiones osteocondrales.5 Los resultados fueron excelentes y los investigadores concluyeron que «en nuestras manos, el PRGF [factores de crecimiento ricos en plaquetas, una forma de PRP] se ha convertido en la primera línea de tratamiento no quirúrgico en estas lesiones».
- Este estudio examinó específicamente las lesiones osteocondrales del hueso del talón en el tobillo. 29 pacientes de 18-60 años participaron en el estudio y recibieron inyecciones de ácido hialurónico o inyecciones de PRP. Mientras tanto el ácido hialurónico como el PRP disminuyeron las puntuaciones de dolor y el aumento de la función, el PRP tuvo puntuaciones significativamente más altas. Dado que los tratamientos tradicionales de inmovilización, bracings y AINEs (anti inflamatorios) a menudo no tienen éxito, los investigadores se animaron por estos resultados, especialmente teniendo en cuenta que la cirugía es la única opción una vez que los tratamientos conservadores fracasan.
En un tercer estudio, los médicos encontraron que después de la extracción de tumores benignos de células gigantes, un gel PRP aceleró la curación y el crecimiento del hueso en los grandes defectos resultantes, y que se logró buenos resultados funcionales sin promover la recurrencia local. 6